domingo, 18 de marzo de 2018

Domingos, diarios visuales...

Me gustan los domingos, los adoro especialmente y esos días en los cuales no hago nada/sólo escucharme/observar/volver a las cosas perdidas en el tiempo/ a mis diarios visuales de otros años/a esta otra persona que soy ahora en la misma piel/
 
 
                      Y entonces me encuentro lo que motivó una obra /un trabajo/ un libro de artista/

 
Todo ha salido de esos días/o de otros/ en los que pareciera que no hice nada/

 
mezclar técnicas/ para crear historias/

 
jugar con los elementos para hacer una composición

 
en un boceto todo está permitido/ no es importante la equivocación/

 
la motivación/desencadena situaciones/sentimientos/

 
corazones de papel/ que se arrugan/se rompen/

 
A veces es bueno hacerse preguntas/ a veces se vacían las casas que una vez estuvieron llenas/ a donde se van los recuerdos que se guardaron tantos años/

 
el racismo/ en que lugar se coloca/

 
que representa un espacio/ lleno o vacío/una maleta con muy pocas cosas sobre una cama/ ninguna de ellas le acompañaron en su viaje/sólo un corazón débil y pequeño que se llenó de esperanza y que dejo de latir/

 
y la palabra que significa/ en el silencio/es verdad/ o no dice nada/o dice mucho/donde estuvo perdida/silenciada/

 
me gusta observar lo que oculta el silencio/ o la palabra/ lo que está detrás de un rostro/lo que se oculta detrás de la verdad silenciada/


las cosas intensas/verdaderas/ que voy encontrando en las lecturas al azar/que evocan certeza/ que colecciono/escribo/transcribo/ordeno y desordeno/hay mucho de todo/

"Lo que importa es cuanto amor ponemos, en el trabajo que realizamos"  Mae West.

domingo, 4 de marzo de 2018

EL VIAJE como METÁFORA...

 
 Este fue mi primer Taller de Libro de Artista, hace ya 4 años...la Idea fue trabajar sobre el VIAJE, ese viaje exterior que a veces hacemos y siempre recordamos, o ese otro viaje, el interior!!!

                                          El resultado de los libros de artista que realizaron   Natalia,Guitti,Nieves,Rosa;Naulé,Carmen,Alicia,Marina y Maribel...fue maravilloso y muy creativo.
Fui a impartir un taller y para mi sorpresa me encontré aprendiendo mucho de cada de uno de ellos, y ese ha sido mi norte en cada uno de mis talleres dar y recibir!!!

Al final del Taller cada uno de ellos habló de su libro y la motivación para realizarlo y tuvimos la visita de Albertina Tafolla y  yo me sentí muy emocionada cuando leí el cuento que a propósito escribí sobre lo que sentí durante esa semana, en la que iba observando los bellos trabajos que iban resultando durante el Taller!!! Cuento que transcribo aquí...





La historia de un Taller de Libro de Artista…atado a un viaje.

 Al menos casi siempre un viaje tiene dos destinos importantes, uno geográfico y otro interior…

A algún lugar de uno mismo se llega en momentos singulares de nuestra travesía por la vida…

En el Tumbao, nadie estuvo tumbado…

El primero que hizo su aparición, fue un hombrecito cargado de sueños y de mariposas en la cabeza que al hacer su aparición dijo:” “nadie se puede tumbar a descansar, llevo una vida aburrida y cansada de hacer todos los días las mismas cosas y una rutina de un trabajo que no me pertenece, sin que nada me emocione”…

Ismael que estaba muy cerca y que también llevaba lo suyo, se atrevió a decir: ”me gusta el mar y mi sueño es navegar en las profundidades donde pueda vivir muchas aventuras, y contó su historia mientras aprendía como la plegaba y como la construía en ese pequeño espacio”…

Las palabras desordenadas e incapaces en ese momento de elaborar una frase, comenzaron a apuntar aquí y allá y mientras pensaba una cosa se le ocurría otra, hasta que se fueron haciendo texto y color…

El cuerpo humano, el más silencioso, comenzó a sentir sus manos y las piernas que querían correr, sus ojos atentos observaba  una mesa y la otra y sin embargo fue acorde con la danza de sus sentidos…

La primavera un poco desubicada, sin saber que hacer comenzó a sentir su alergia característica, su desasosiego y pensó mientras miraba, creo que yo no podré llegar a hacer nada, pero estoy aquí y lo intentaré…

Del otro lado rostros y caritas comenzaron a pensar en historias, en la suya propia desde su infancia y se dijo manos a la obra, siempre hay algo que contar, empezaré por la mía, y aunque un poco perdida de tantas cosas por hacer, llegó y aparcó su bicicleta para hacer…

De repente su amiga que la acompañaba y que llevaba algunos de sus dibujos infantiles comenzó a componer su historia, donde el cielo es verde y el mar puede llegar a convertirse en negro y hasta una estrella se puede tocar en una noche cualquiera…

Las texturas y colores de trabajos hermosos que habían estado mucho tiempo guardados por miedo a  aparecer y con un tiempo siempre en otro lugar, se hicieron páginas para llegar a construir su libro…

Mientras tanto alguien un poco más lejos y apartada del lugar pensaba que sin ser imposible, los paraísos sí que existen y que claro que si ¡¡¡ puede ser posible!!! aunque para ello haya que aprender a dar una puntada, aprender a pegar y a utilizar una tijera, para darle vida al latido de su corazón…

Sólo una persona, atenta a todo y a todos, a lo que se hacía y que llegó el primer día de un martes y jueves de 6 a 8 de la tarde cargada con una maleta de libros y un mundo de ideas para compartir y que intentó hacer volar, estaba completamente segura dentro de sí misma que sí se permite soñar, las pasiones  aunque luego se extingan, como la suya de hacer libros diferentes que un día  supo que se llamaban libros de artista, podía materializarse…

Y pensaba si alguien adivina los personajes de esta historia, me daré por satisfecha con este taller que una vez soñé en realizar y en el que todos hemos participado…

 
Para todos los que formaron parte de esta historia, les doy las gracias por permitirme aprender de cada uno de ellos, Natalia, Guitti, Nieves, Rosa, Naulé, Carmen, Alicia, Marina y Maribel….

Un viaje a la imaginación que se desarrolló en un espacio llamado el TUMBAO, en una ciudad llamada Alicante a comienzos de la primavera de un año dos mil catorce…Muchas gracias a todos...

Mirtya Huizzi G.