Los seres humanos, somos emocionales y lo que nos rodea nos provoca estados de emoción.
Por lo tanto los colores y sus combinaciones desencadenan respuestas emocionales y con frecuencia inspiran diversas sensaciones.
Es así que si hacemos un uso asertivo de ellos, podemos potenciar diversos estados de ánimo.
Los matices y tonalidades de cada uno de ellos son infinitos.
Y mi trabajo se relaciona a esos estados de ánimo que están atados a las historias de mis libros de artista y a mi obra en general.
Así definimos...
Los ROJOS, como íntimos, reconfortantes, atrevidos, sensuales y apasionados.
Los ROSADOS, son positivos y femeninos, animan cualquier espacio donde se coloquen.
Los NARANJAS, estimulan la creatividad, son cálidos y acogedores.
Los AMARILLOS, son alegres y amenos. Los tonos muy intensos de este color están asociados a favorecer el buen funcionamiento del cerebro.
Los VERDES, representan y conviven en la naturaleza, es por eso que son relajantes y mantienen el equilibrio, son muy estimulantes.
Los AZULES, producen calma y son serenos y reflexivos, siempre están asociados al cielo y el mar.
Los VIOLETAS, sensuales y estimulantes, refrescantes y representan la espiritualidad.
Los colores NEUTROS, TIERRAS y GRISES, surgen de las combinaciones de los colores arriba señalados.
Pueden ser cálidos o fríos, pero las mezclas con otros colores producen sorpresas maravillosas.
Ya que los colores tienen infinitas gamas.
Hay un libro inmenso que recomiendo por la infinidad de ejercicios de colores. Este trozo que comparto abajo está en ese libro.
" Cuando se mira fijamente un pedacito de papel o de seda de color vivo sobre una pantalla blanca poco iluminada y al cabo de algún tiempo se lo retira, sin apartar la mirada, se percibe en la pantalla blanca el espectro de otro color".
GOETHE. Teoría de los colores.
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